Mis ansias afloran cada vez que te siento mi misma piel
Cada vez que alongas tus manos para perfilar mi cuerpo de mujer
Que palpita y estremece ante tus besos y el rocío fresco
Que invade nuestra alcoba, como el humo que emerge
Mientras el incienso arde y nuestros cuerpos convergen
Eres el galope que agita mi corazón en cada latido
El eco de cada gemido que brota ante tu presencia
Déjame abrazar tu cuerpo, dejarme perdurar en el eternamente
En un beso ampliar el estremecer de mil noches vividas
Dualidades en un inicio y un final de esa llama que no se extingue
que consume la dureza de una vela que permanece
encendida mientras nuestros cuerpos gimen de placer.
Cuerpos que estremecen como si conjurara sus fantasmas
Dejando solo nuestras almas emerger en esa entrega plena.
Cada vez que alongas tus manos para perfilar mi cuerpo de mujer
Que palpita y estremece ante tus besos y el rocío fresco
Que invade nuestra alcoba, como el humo que emerge
Mientras el incienso arde y nuestros cuerpos convergen
Eres el galope que agita mi corazón en cada latido
El eco de cada gemido que brota ante tu presencia
Déjame abrazar tu cuerpo, dejarme perdurar en el eternamente
En un beso ampliar el estremecer de mil noches vividas
Dualidades en un inicio y un final de esa llama que no se extingue
que consume la dureza de una vela que permanece
encendida mientras nuestros cuerpos gimen de placer.
Cuerpos que estremecen como si conjurara sus fantasmas
Dejando solo nuestras almas emerger en esa entrega plena.